La comunidad de regantes de Sant Jordi-Sant Francesc aseguró ayer que el proyecto del campo de golf de la familia Matutes «no perjudica a nadie». El vicepresidente de la comunidad de regantes, Mariano Ribas, dijo ayer que «la única ventaja será usar el agua que nos sobra a nosotros antes de ir al mar y que alguien nos ayude a sufragar estos gastos. Si fuera esta persona [en alusión a Abel Matutes] u otros que se lo gastan para campos de golf, jardines o para unos jardines, pues de mil amores».
La comunidad de regantes animó a los agricultores de la zona a que suman a esta comunidad: «Si no podemos conseguir que más 'pageses' se apunten, será muy difícil mantenerlo. Si hay más regantes se compartirá más agua depurada y no habrá que tirar el excedente al mar». Actualmente hay unas quince personas que integran esta comunidad. La familia Matutes, representada por Agustín de Felipe, figura dentro de esta comunidad desde los inicios, aunque los regantes aseguraron que el empresario «nunca ha ido a hablar con nosotros». Los regantes han manifestado su interés en que Matutes siga vinculando al plan para ayudar a abaratar los costes.
Los comuneros opinan que la actividad agrícola «será difícil que se recupere» en la zona aunque el agua se utilizará para el riego del campo para plantaciones de forraje o alfalfa. Los regantes son de la zona de ses Salines y del aeropuerto. «Pensamos que es mejor dejar un huerto a nuestros hijos y no un 'bosque' de matorrales».
Actualmente, la comunidad de regantes están en fase de tramitación del proyecto de riego previsto por el Ministerio de Agricultura con una inversión estatal de 2,6 millones de euros. Ante esta situación, se autodenominan «una comunidad virtual» ya que está en tramitación burocrática.
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