El president del Govern, Jaume Matas, anunció ayer en el Parlament que la próxima semana convocará una comisión política entre representantes de todos los partidos con el fin de intentar desbloquear los problemas que han surgido durante la ponencia parlamentaria. Durante su intervención en la Cámara, Matas acusó a los socialistas de intentar aprobar lo antes posible el nuevo Estatut «para quitarse el problema de encima y enviarlo a Madrid, donde el PSOE sí tiene mayoría».

De forma inesperada, y cuando la ponencia parlamentaria que debate la reforma del Estatut ha comenzado la segunda lectura del texto, Matas comunicó al portavoz del PSM, Pere Sampol, que el contenido del nuevo Estatut es «una prioridad para el Govern», aunque reiteró que su objetivo es lograr la aprobación de la reforma estatutaria cuánto antes. Según Matas, si se alcanza un acuerdo sobre financiación «para el resto de apartados de la reforma del Estatut será más fácil alcanzar un acuerdo». «Siempre vamos a apoyar al Govern para conseguir mayores competencias», dijo.