Ellos se dan la mano para saludarse y nunca, ni entre familiares ni amigos, se preguntan si quieren hacer esto o beber aquello porque ya lo tienen todo muy organizado desde el principio. Pero como saben, aquí nada es igual, y vienen a aprender de ello. Los nueve estudiantes llegados desde el Instituto Kopernikus de Bakenfelde (Alemania) son los primeros de ese país que realizan un intercambio estudiantil con alumnos ibicencos del IES Sa Blanca Dona, que le devolverán la visita próximamente. Ayer comenzaron a asistir a las clases del instituto, aunque los principales conocimientos que se llevarán no son sólo de idioma y cultura, sino más bien de forma de vida. Así lo explica Ana, su profesora en Alemania, que es española y llegó junto a otro profesor de nombre Holger: «Vienen para tener contacto con la gente de la isla y con la cultura española, porque así pueden ver las grandes diferencias de educación entre unos y otros. Por ejemplo, deberán acostumbrarse a que se les pregunte lo que quieren hacer en vez de obedecer a un plan que ya tienen organizado desde la mañana», comentó. Otro ejemplo de compartir en la diferencia que no será fácil para Franziska, una alumna del grupo, de 18 años, que encuentra poco simpática la costumbre dar dos besos como saludo. «Quiero ver el estilo de vida y conocer la lengua, pero dar dos besos me parece anormal porque me imagino al padre de mi novio que tiene 75 años y no es nada lindo de besar. Para eso nosotros nos damos la mano».

El programa se llama «Europa Sense Fronteres» y la organizadora del intercambio es la profesora del instituto Ana Esquerdo. Y aunque aseguran que lo primero que pensaron los alumnos es en la fiesta, al conocer el destino del intercambio, sólo la celebrarán el sábado ya que tienen un programa para visitar la isla durante la estancia. A ellos se suman hoy 15 alumnos de Holanda que también compartirán el intercambio procedentes de Ulenhof College de Dotinchen, un colegio que viene por cuarta vez. Entonces no sólo se hablará en alemán, inglés, holandés y español, sino que aprenderán nuevas formas de decir 'hola'.

L.Aversa