Àngela Rodríguez conserva sólo buenos recuerdos de su trayectoria
como docente durante 31 años en la escuela unitaria de La Revista
en el Parque Natural de Ses Salines. «Le he dado casi toda la
vida», confiesa esta mujer vitalista mostrando con orgullo fotos de
antiguos alumnos. «Esta es de un premio de 50.000 pesetas que
dieron en Sant Josep a mis niñas de octavo», recuerda Àngela
mientras señala una de las fotos que decoran la escuela.
En La Revista empezó a trabajar como maestra y, pocos años antes
de su jubilación, ha de dejar el centro porque este es el último
curso de la escuela unitaria. «He luchado para que el centro tenga
todo lo posible y más, pero yo no puedo hacer nada», relata ante el
inminente cierre. Hace 17 años hubo una intentona de cerrar la
escuela por parte de la empresa, pero las presiones de los padres
lograron que el Ministerio de Educación les diera la razón
entonces. «Se ha mantenido la escuela gracias a la lucha de los
padres hace 17 años. Pueden sentirse orgullosos. Nunca pensé
entonces que se pudiera mantener y estoy superagradecida a todos
los padres, salineros y no salineros», afirma la profesora.
La Revista le ha aportado muchas satisfacciones, pero también ha
tenido que luchar para que el centro estuviera en condiciones.
«Cuando vine no había luz ni agua. Fui al Ayuntamiento pero
Salinera me dio enseguida la luz y ellos se ocuparon de todo. En
aquel entonces les interesaba aquí la escuela e incluso me hicieron
mesitas y sillas para los alumnos», recuerda.
Àngeles es la profesora de La Revista, pero no está sola para
enseñar a los nueve niños de diferentes cursos escolarizados, sino
que la escuela dispone de tres profesores itinerantes, que imparten
las materias de música, educación física e inglés, además de un
cuarto de apoyo para educación infantil. Pese a no disponer de aula
de informática sí que cuentan con tres ordenadores para los nueve
alumnos.
Una situación «privilegiada» teniendo en cuenta la saturación de
algunos centros de Eivissa. Pero si en el interior el centro está
en unas condiciones más que idóneas para impartir clases, el
aspecto exterior no lo es tanto ya que son terrenos privados,
propiedad de Salinera. Varios vehículos, presumiblemente de la
empresa, están estacionados en la puerta del colegio con lo que es
inviable que los niños puedan disponer de un patio en la puerta del
colegio.
Salinera, la propietaria del inmueble que lleva ya nueve años
reclamando su devolución a la Conselleria d'Educació, se ha ido
apoderando del exterior. Educació ya ha anunciado el cierre del
centro a los padres y su devolución a Salinera, que lo
acondicionará para darle un uso pendiente aún de decidir.
Este será el último curso de La Revista en el que la profesora
trata de que los niños vivan ajenos a todo lo sucedido. El curso
que viene conocerán otro colegio y estas son las últimas
clases.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.