MAITE ALVITE /EFE
Como ya hiciera el año pasado, el grupo municipal popular del Ayuntamiento de Eivissa ofreció ayer al alcalde, Xico Tarrés, «su apoyo incondicional» para sacar adelante la propuesta de remodelación del puerto «acordada con Autoritat Portuària». Ante las divergencias surgidas en el seno del equipo de gobierno municipal, la portavoz del PP de Vila, Virtudes Marí, garantizó que «si se lleva a pleno esta propuesta la oposición la apoyará» con el fin de que se materialice un acuerdo que considera «urgente e inaplazable». «No será el PP quien ponga trabas a esta decisión», insistió, antes de manifestar su preocupación por el hecho de que hayan resurgido las diferencias que se produjeron en 2005 dentro del equipo de gobierno del Pacte al abordar el tema. Virtudes Marí aseguró que el ejecutivo local es una «olla de grillos donde cada uno piensa lo que piensa y la única manera que tiene de seguir unido es no confrontando sus posiciones diferentes». «El Pacte sólo sirve para estar en la oposición porque cuando tiene que tomar una decisión importante no sabe ponerse de acuerdo y su única respuesta es el inmovilismo», reiteró. El PP manifestó su confianza en que el alcalde mantenga la postura anunciada la pasada semana, cuando alcanzó un principio de acuerdo con Autoritat Portuària, y «ponga por encima de los intereses del Pacte y del equipo de gobierno el interés ciudadano». La portavoz de la oposición en el Consistorio recalcó que, aunque no tenga competencias en el puerto, «el Ayuntamiento no es un sujeto pasivo, tiene un peso político en ese asunto» y recordó que «el plan especial del puerto lo tiene que aprobar la administración municipal».

Por su parte, el secretario general del PSOE en las Pitiüses, Roque López, quitó ayer importancia a la supuesta crisis abierta en el ejecutivo local del Ayuntamiento de Eivissa y aseguró que todo el asunto se debe a una mala interpretación de las palabras del alcalde, que «no fueron las más adecuadas».