La Asociación de Padres y Madres de Alumnos (Apyma) de Sant Jordi
seguirá con su lucha para acabar con el polvo y tierra que inunda
al colegio de infantil y primaria, a escasos metros de la
carretera, a consecuencia del paso de camiones de las obras del
desdoblamiento de la carretera del aeropuerto. «Aquí no hay quien
aguante, porque hay una polvareda continua», dijo ayer el
presidente de la Apyma, José Suñer. Una máquina pasa todos los días
para arrastrar el barro a las orillas de la carretera que ocasiona
la polvareda.
Los padres no descartan movilizaciones si no se arregla esta
situación, ya que hay algunas aulas, las de infantil, que están al
lado de la carretera, sólo separadas por una acera de un metro de
ancho.
Este fue uno de los acuerdos adoptados ayer en la asamblea
convocada por los padres, a la que se le invitó a los vecinos de
Sant Jordi, que reunió a un centenar de personas. Asimismo, se
acordó mantener las reuniones previstas con el presidente del
Consell, Pere Palau, y el alcalde de Sant Josep, José Serra
Escandell, y, asimismo, han decidido entrevistarse con el director
insular de la Administración General del Estado, José Manuel
Bar.
En la asamblea se acordó, además, crear una comisión de
seguimiento sobre las actuaciones a seguir por los problemas
ocasionado por las obras del desdoblamiento de Sant Jordi.
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