El secretario adjunto de Pimeco, Àngel Pujol, manifestó que los
comerciantes de Balears esperan con «optimismo» el inicio de la
campaña de rebajas que comienzan hoy, aunque advirtió que las
ventas obtenidas no servirán para «salvar» el año.
Pujol explicó en declaraciones a Europa Press que las rebajas
son bienvenidas por los comerciantes cuando vienen precididas de
una «mala» temporada. Sin embargo, destacó el peligro que supone
iniciar la campaña con grandes descuentos para liquidar lo antes
posible las existencias, provocando que la demanda se concentre en
los primeros días para volver a «la atonía», en un proceso que dura
dos meses. Por otra parte, subrayó que las rebajas suponen una
venta con menor margen de beneficio, recordando que «un negocio no
sólo consiste en vender, sino hacerlo con unas ganancias para que
el empresario pueda hacer frente a sus gastos fijos». Asimismo,
señaló que los sectores de calzado y confección, los que ha
resultado más perjudicados esta temporada, podrán ser los que más
de beneficen de esta campaña y consideró que las rebajas son una
opción positiva para convertir el stock en liquidez y sustituirlo
estos productos por los de la nueva temporada.
La Direcció General de Consum de la Conselleria de Salut
recuerda, por su parte, que existe la venta en rebajas cuando los
productos se ofrecen en el mismo establecimiento comercial a un
precio inferior ordinario de venta, con motivo del cambio de
estación, fin de temporada o renovación de existencias. Se debe
indicar claramente el precio rebajado junto con el precio anterior,
y deben estar correctamente etiquetados, según apunta la
conselleria balear de Salut. Los precios de venta deben figurar
tanto en los escaparates como en el interior del comercio y los
artículos en rebajas, recuerdan desde Consum, no deben estar
deteriorados o en mal estado.
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