El hospital Can Misses finalizó 2005 con una cifra récord de nacimientos ya que llegó a 1.100 partos. La tendencia de los partos en las Pitiüses es de crecimiento en los últimos años. En 2003 se superó, por primera vez, el millar de partos, con 1.064. Un año después hubo ocho partos menos, pero este año que acaba de finalizar se llega a los 1.108 , según los datos facilitados por fuentes sanitarias.

En casi la mitad de los 1.108 nacimientos (497) se utilizó la anestesia epidural, una técnica que permite a la mujer parir sin sufrimiento y estando plenamente consciente en el momento de la llegada al mundo de su hijo. Las cesáreas supuso el 26% de los nacimientos.

Sólo un 15 por ciento de mujeres a las que se le ofreció la epidural rechazaron esta técnica. Alrededor de un 70 por ciento de las parturientas aceptaron la epidural aunque a un 20 por ciento de ellas no se le pudo suministrar por diversos motivos: tener fiebre, tensión baja, llegaron tarde o por cualquier otra contraindicación médica en la que no se aconsejaba suministrar la epidural.

La anestesia epidural empezó a aplicarse en Can Misses en septiembre de 2000, mes en el que se contabilizaron nueve casos. Tras las reticencias iniciales de muchas parturientas, la epidural se utiliza cada vez más. Sólo un dato, seis años después de su aplicación, se quintuplica el número de partos que se utiliza la epidural ya que de las nueve epidurales de septiembre de 2000 se ha pasado a 43 en el mismo mes de 2005.

Para la aplicación de la epidural se necesita un especialista de anestesia con experiencia. La opinión de muchos profesionales sanitarios es que la analgesia epidural en el parto es la técnica que menos complicaciones presenta tanto para el feto como para la madre en el control del dolor durante el parto. Entre las complicaciones que puede presentar la epidural es hipotensión, dolor de espalda y cefaleas .

El aumento de los nacimientos ha supuesto que los paritorios se queden pequeños. Las parturientas tienen que hacer un trasiego desde Maternidad, planta baja, hasta los paritorios, en el primer piso, desde que empiezan las primeras molestias. «Si se aumenta el espacio del paritorio, las mujeres estarían desde las primeras molestias en los paritorios porque se controlan mejor», defiende Juan Navarro, portavoz de sanidad del PSOE. Tal y como están los paritorios es inviable una ampliación, aunque el PSOE propone que se aproveche el nuevo edificio de diálisis para trasladar parte de los quirófanos y ganar espacio al paritorio.