El Grup d'Estudis de la Naturalesa (GEN) cuestiona qué «interés general» tiene la promoción de 78 viviendas que promueve Matur S.L y Retingle S.L. en el solar de ses Galamones, en Can Misses, para justificar el traslado del acueducto romano. Los ecologistas apuntan que el artículo 35 de la Ley de Patrimoni de les Illes Balears contempla la posibilidad de desplazar inmuebles patrimoniales, pero por «causa de fuerza mayor o interés social». En este sentido, el GEN apunta que el artículo 7 de la Carta de Venecia afirma que sólo se pueden trasladar monumentos «cuando su salvaguarda lo exija o cuando razones de un gran interés nacional o internacional lo justifiquen». «¿Qué interés nacional hay en este caso, salvo el interés inmobiliario de unos promotores? La Conselleria de Patrimoni se ha plegado a los intereses de una promotora muy concreta», afirma Mariano Marí, portavoz del grupo ecologista.

El GEN reivindica también la validez de la Carta de Venecia porque, aunque no tiene rango de ley, cuenta con la adhesión de la mayoría de gobiernos, entre ellos el español. Asimismo, Marí insiste en que el traslado del hallazgo transgrede la ley de patrimonio estatal y balear, en contra de lo que afirma el informe jurídico realizado por el letrado del Consell Antoni Riera, y que, según el GEN, «contiene contradicciones».

El GEN lamenta que los informes técnicos que avala la reubicación del acueducto estén «hechos a medida» para respaldar «una decisión política». Recuerda el GEN que el mismo técnico del Consell sí redactó un informe a favor de la conservación in situ de otro tramo del mismo acueducto en el Camí Vell de Sant Mateu, junto a GESA, y que obligó a la compañía eléctrica a modificar un proyecto. El GEN pidió la protección de este hallazgo con la figura BIC y el Consell, según dice Marí, no ha contestado siquiera a dicha petición en contra de lo que dice la ley.