Belleza en las profundidades

Ocho rutas para conocer los ricos fondos marinos del sudoeste de la isla de Eivissa. Unas fáciles, realizables incluso por neófitos y para las que no es necesario más equipamiento que unas gafas de buceo; otras más complicadas, dirigidas a expertos que ya cuentan con titulación en submarinismo. Todas ellas están detalladas en una guía que ayer fue presentada por el Ayuntamiento y que está integrada dentro de «Carreranys de Sant Josep», una iniciativa de la Concejalía de Turismo para la promoción y fomento del ocio deportivo en el municipio. Ésta viene a unirse a las ya publicadas sobre kayak, senderismo y mountain bike. Expertos submarinistas como Diego Ponce han diseñado los ocho recorridos que se proponen en una publicación de unas 20 páginas con el objetivo de facilitar tanto a los residentes como a los que vienen de fuera la inmersión en las aguas pitiusas para conocer las maravillas de sus profundidades. «Podrían haber sido 800» -afirma Ponce en alusión a las múltiples posibilidades que ofrece la zona- «pero al final hemos escogido ocho de ellas estructuradas en diferentes niveles en función de cada persona. Así pueden encontrar una muestra de lo que ofrece el municipio». Como referencia se ha tomado un tiempo medio de 45 minutos y el grado de dificultad va del bajo al alto pasando por el medio. «En el agua no hay ninguna señal de tráfico, así que nos servimos de puntos de referencia para la orientación, aunque a diferencia de las guías editadas para otras actividades el punto de entrada y salida es siempre el mismo», explica este monitor de buceo con más de una década de experiencia. Tantos años dan para conocer muy bien el mundo submarino que nos rodea, y aunque las ocho rutas que se incluyen en la guía tienen su encanto, a la hora de recomendar alguna Diego se queda sin dudar con dos de ellas: «Una es la que hay en la playa de Cala d'Hort. Pasa por encima de un banco de arena y un banco de posidonia, y se puede hacer tanto con botella como con tubo. Es la mejor para que la gente se inicie», asegura. Otra de sus preferidas es el campo de gorgonias que hay en el parque natural de la parte de poniente de las islas Bledas, «uno de los más importantes, sino el que más, de todas las Balears», dice.