E.P./M.A.
La Federación Balear de Restauración denunció ayer que el 'todo incluido' ha provocado en Eivissa este verano un descenso del 30 por ciento en la facturación registrada por los establecimientos situados cerca de la playa, mientras que en Menorca apenas tuvo incidencia y en Mallorca produjo importantes efectos negativos en comercios y bares próximos a los hoteles que ofrecían esta modalidad turística. Según informó ayer en un comunicado la Federación Balear de Restauración, en la pasada junta directiva se hizo balance de la temporada de verano y se trató de solucionar los problemas que afectan al sector, como son el 'todo incluido'; la promoción exterior; el sello de calidad del Instituto de Calidad Turística del Govern; el convenio colectivo; y la música en vivo y exenta de amplificación en los restaurantes.

La Comisión de Turismo del Parlament de Balears constituyó ayer la ponencia que se encargará de estudiar las repercusiones que tiene sobre la economía balear la modalidad del 'todo incluido'. El diputado del Grupo Popular Antoni Marí Tur será el coordinador de la ponencia, que se ha creado en cumplimiento del acuerdo de la sesión plenaria del pasado diez de mayo, que aprobó por mayoría la Proposición No de Ley del Grupo Popular relativa a la regulación de esta modalidad turística. Marí Tur señaló en ese momento que la regulación de esta oferta es «necesaria» para poder mantener unos estándares de calidad, además de permitir que los turistas conozcan «qué van a encontrarse cuando vengan a visitarnos».