El Ayuntamiento de Sant Josep aprobó ayer, con el voto en contra
del Pacte, el proyecto y el pliego de condiciones para la
contratación del proyecto de bulevar de Cala de Bou, con un
presupuesto de tres millones de euros y un plazo de ejecución de 20
meses. Los progresistas, según la concejala Josefa Marí, votaron en
contra de la contratación de las obras por la «fuerte oposición de
los vecinos», que, según dijo, «prefieren que la zona se quede como
estaba antes».
Paradójicamente, Josefa Marí aseguró que el Pacte está a favor
del Plan de Excelencia Turística de Cala de Bou, aprobado hace ya
casi tres años, aunque no de «un proyecto que se ha convertido en
un caos y en algo negativo». La Asociación de Vecinos de Cala de
Bou critica con dureza este proyecto en la carta enviada
recientemente a sus socios para la celebración de los actos
festivos del barrio de la tercera semana de octubre. En este
escrito, los vecinos advierten de que el proyecto no dice nada de
la mejora de la red de saneamiento y, entre otras cosas, que,
aunque faltan muchas calles sin urbanizar, sólo se invertirá en
«una parte de una sola calle». «El Plan de Excelencia no es una
inversión finalista para el barrio sino un 'chupete' para algunos
vecinos», reprocha la asociación de vecinos en su carta. El Pacte
también lamentó ayer en el pleno la falta de previsión de las obras
y ya vaticinó que se llegará a la próxima temporada turística con
la calle patas arriba, con el consiguiente perjuicio para una
actividad que atraviesa «un momento crítico».
El equipo de gobierno reconoció algunos errores, pero aseguró
que éstos con el paso del tiempo se han ido subsanando. El concejal
de Gobernación y Transportes, Antoni Cardona, señaló que quizá el
Ayuntamiento «no ha sabido vender bien el proyecto» y que, en todo
caso, «ya no se puede volver atrás».
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