El Ayuntamiento de Sant Josep permitió ayer que los vecinos desalojados por precaución pudieran regresar a sus casas. El primer informe técnico realizado por el Consistorio descartaba ayer, según el concejal de Urbanismo, José Marí Ribas, Reganes, cualquier riesgo para las viviendas situadas encima del acantilado, por lo que se levantó la orden de desalojo y los vecinos pudieron regresar a sus casas. Al mediodía, abandonaron el hotel es Pins las últimas dos personas que aún quedaban hospedadas. El Ayuntamiento realojó en este establecimiento hotelero de la bahía a los habitantes de las 17 viviendas que fueron desalojadas la noche del domingo como medida de precaución.

Los geólogos e ingenieros han reducido el área de riesgo, que ahora comprende tres viviendas unifamiliares, dos de ellas en muy mal estado, y el Residencial Vista Alegre, el bloque de apartamentos que ha quedado siniestro total. La vivienda situada justo encima del Residencial ha quedado fuera de la zona acotada. Cuando sucedió el desastre natural, en este inmueble habitaban siete jóvenes procedentes de Barcelona.