Una encuesta realizada por la Pimeef (Petita i Mitjana Empresa d'Eivissa i Formentera) constata que el 65 por ciento de los comerciantes de las Pitiüses ha registrado peores ventas durante el periodo de rebajas en comparación con el pasado año. Además, sólo el 15 por ciento de los encuestados considera que las ventas han sido mejores, mientras que el 20 por ciento registra las mismas que el pasado año.

Los motivos a los que achacan estas pérdidas en las ventas se encuentra la escasez de gente en Eivissa y Formentera durante los meses de verano o la nueva situación comercial con la que se encuentra el comercio tradicional con la entrada de grandes cadenas. Asimismo, los comerciantes encuestados también destacan que la gente no ha gastado la misma cifra de dinero que el año anterior.

Por otro lado, y según el estudio realizado por la Pimeef, el 58 por ciento de los responsables de los comercios de las islas augura malas ventas para la temporada otoño-invierno, mientras que el 42 por ciento prevé que la facturación será mejor que la registrada en 2004. En este sentido, los comerciantes, una vez vista la evolución de los meses de verano, creen que la tendencia se mantendrá en sentido negativo.

Por último, el departamento de comercio de la Pimeef muestra que el 63 por ciento de los establecimientos de las Pitiüses considera que las rebajas deberían iniciarse en el mes de agosto, en lugar de en el mes de julio como se hace hasta ahora. El 11 por ciento de los consultados apunta que las fechas establecidas para el periodo de las rebajas está bien, mientras que el 26 por ciento restante cree conveniente que el inicio de descuentos coincida con el fijado en la península. En relación a esta última cuestión, los consultados indican que cuando el género de verano llega coincidiendo con las rebajas además de considerar el mes de julio como un periodo importante de la temporada para vender bien debido a la afluencia de visitantes.

El representante del departamento de comercio de la Pimeef, Vicent Tur, apuntó que la tendencia a la baja se ha registrado tanto en el comercio tradicional como a los establecimientos dirigidos al turismo. Entre las causas, Tur apuntó al «todo incluido» y a la existencia de grandes comercios: «El primer caso afecta a todos los locales colindantes con hoteles que oferten esta práctica». En relación al segundo punto, Tur señaló que el comercio tradicional no puede competir con los precios de las grandes cadenas existentes.