El día grande de las fiestas de Jesús congregó ayer en su parroquia a centenares de vecinos que no quisieron perderse la tradicional celebración.

El obispo Vicente Juan Segura fue el encargado de oficiar la homilía en honor a Nuestra Señora de Jesús que comenzó a las 12,00 horas y concluyó una hora después, dando paso a la procesión por las calles del pueblo.

La agrupación Nuestra Señora de los Dolores de Eivissa encabezó la marcha que una vez más contó con una amplia representación política por parte de las autoridades del Consell Insular y del Ayuntamiento de Santa Eulària. Entre ellos, el presidente Pere Palau, el conseller de Patrimoni, Joan Marí Tur, la consellera de Vías y Obras, Stella Matutes, el conseller de Industria y Nuevas, Tecnologías Diego Guasch, y la consellera de Participació Ciutatana Carmen Domínguez. El alcalde de Santa Eulària Vicent Guasch y el concejal de Deportes Francisco Tur también quisieron acompañar a la delegada de Jesús Esther Marí Serra en la celebración del día grande de Jesús.

Una vez terminada la procesión con su virgen engalanada con una prendada pagèsa, llegó el turno deball pagès a cargo de sa Colla de l'Horta que dio paso a la convidad de dulces típicos como son los bunyols y orelletes, bien acompañados por evi pagès.

Por la tarde, los actos tradicionales continuaron con la ofrenda de frutos a Nuestra Señora de Jesús en la que no faltaron los naranjos, melocotones, las uvas y los plátanos, que vecinos y niños acercaron en cestos hasta los pies de la imagen y que fueron recibidos frente al altar por el padre Enrique. Esta ofrenda responde a una costumbre de antaño en la que los payeses engalanaban sus carros para llevar la ofrenda de frutos a la patrona en agradecimiento por la cosecha de todo el año.

La jornada de festejos continuó con la entrega de los trofeos a todos los ganadores de las diferentes competiciones del año. Y por la noche, el espectáculo de variedades dio paso a gran verbena popular amenizada por la Orquesta Mítica. El espectacular castillo de fuegos artificiales debió cerrar el día grande y con él las fiestas de Jesús que se han venido celebrando con actividades y espectáculos desde hace algo más de dos semanas y uniendo a los vecinos del pueblo y de otros pueblos alrededor de una gran mesa para la sopar popular; a los niños con juegos y a los mayores con un homenaje.L.A.