El cambio de postura del Ayuntamiento sobre el desarrollo urbanístico de ses Feixes reaviva la polémica sobre este lugar y pone de manifiesto una vez más las diferencias entre Consell y Ayuntamiento.

El Consell sale así al paso de la noticia publicada por este periódico en la que se desvela que el Ayuntamiento de Eivissa tiene previsto declarar como rústicos los terrenos de ses Feixes en la versión definitiva del nuevo PGOU. Este cambio de criterio se sustenta en el dictamen jurídico realizado por la Universitat de les Illes Balears (UIB), que, por un lado, reduce considerablemente el pago de posibles indemnizaciones a los propietarios, y, por otro, asegura que el Consell debe hacer frente a una parte de esta carga económica.

El presidente del Consell, Pere Palau, afirmó ayer, en cambio, que el Consell «no tiene ninguna responsabilidad compartida» en el asunto de las posibles indemnizaciones y que, en todo caso, «eso lo debería decir un juez». Palau insistió en que el hecho de que ses Feixes estén protegidas mediante la figura BIC no implica que sean inedificables. «No existe ninguna norma en nuestro ordenamiento jurídico que obligue a clasificar como suelo rústico unos terrenos por el hecho de que hayan sido declarados BIC», aclara la nota de la institución. Precisamente, el Plan Territorial Insular (PTI), recordó Palau, determina que en ses Feixes se compatibilizará las posibilidades de desarrollo urbanístico con la preservación de los valores ecológicos y etnológicos existentes: «Por tanto, si el Ayuntamiento pretende clasificar los terrenos como suelo rústico, no puede derivarse ninguna indemnización de este hecho para el Consell».

El presidente eludió hacer ningún comentario sobre qué postura adoptará el Consell una vez que el PGOU llegue a sus manos para su aprobación definitiva. «Primero tiene que llegar, y luego lo estudiaremos. Pero tengo mis dudas de que llegue», señaló.

El Plan Especial
El Consell asegura, además, que la declaración BIC «no paraliza la tramitación administrativa de los proyectos de los propietarios». En todo caso, el Consell puntualiza que hasta que no esté aprobado el Plan Especial de Protección de la zona, que debe aprobar el Consistorio, todas las obras deben pasar por la Comisión Insular de Patrimonio, tal como indica la Llei de Patrimoni històric de les Illes Balears. Palau recuerda que ha ofrecido personalmente al alcalde de Eivissa la colaboración de los técnicos de la institución para la elaboración y aprobación de dicho plan, que, según el presidente, «ya debería estar listo». «Esta tardanza perjudica a los ciudadanos, que se encuentran en una situación incómoda», subrayó el presidente.