C.ROSSELLO
Poco más de un mes después de que se implantase en Balears la ley de drogodependencias y otras adicciones y tras una semana desde la jornada sobre tabaquismo que se dio a los miembros de la Pimeef y la Caeb en Eivissa y Formentera, el balance parece positivo ya que los bares y restaurantes de la isla están trabajando de forma progresiva para cumplir la normativa vigente.

Víctor Martínez, propietario del restaurante Sal i Pebre, comenta que al entrar en vigor la ley «llamé al teléfono de información y me dijeron que podía habilitar una zona para fumadores que estuviese bien ventilada, pero de todas maneras hemos quitado los ceniceros de las mesas». Respecto a la actitud de los clientes, Víctor destaca que es muy positiva porque «la gente está bastante concienciada y normalmente pregunta antes si se puede encender el cigarrillo».

En el restaurante Ca'n Alfredo, su dueño Joan Riera, explica que también han quitado los ceniceros y tampoco se vende tabaco, además, él mismo informa a todos y cada uno de los clientes, tanto si están en la terraza como dentro del local, de que en esta Comunidad Autónoma existe una ley de drogodependencias. Según Riera, «el problema es que mucha gente no sabe que en los bares, cafeterías y restaurantes de Balears ya no se puede fumar», porque en el resto de España hasta principios de 2006 no entra en vigor la normativa que regula el consumo de tabaco.