Atrás quedaron los complementos caracterizados por su pequeño tamaño. Lo que más se ve en la calle y, por tanto, se ha convertido en una tendencia más, que es recomendable seguir este verano para ir a la última, son los collares de grandes dimensiones. Este tipo de complementos suelen quedar muy bien tanto para el vestuario de día como para el de noche. Un simple vestido negro puede convertirse en un atuendo especial si nos ponemos un collar blanco, como el que muestra la fotografía. Asimismo una simple camiseta blanca puede verse acentuada con un collar de colores vistosos durante el día. Estos collares suelen aumentar de precio a medida que crece su tamaño y dependiendo del material que se haya utilizado para realizarlo: coco, hueso, marfil...etcétera.

Generalmente estos collares se venden en las tiendas especializadas en accesorios y suelen ir acompañados de pulseras o pendientes a juego.M.J.R.