A lo largo de este mes de julio han ido apareciendo por las cunetas
de las carreteras de la isla y por rincones escondidos cercanos a
éstas varias decenas de coches abandonados en mal estado.
Según fuentes policiales, se trata de vehículos que sus
supuestos propietarios abandonan a raíz de haber sufrido un
accidente de tráfico o quizás alguna avería.
Se trata de coches sin la documentación en regla, tal vez
robados en algunos casos. Una vez sufrido el accidente o la avería,
sus presuntos dueños no pueden avisar a la Guardia Civil por las
posibles irregularidades en la documentación.
Según los responsables de Tráfico, en otros casos se trata de
viejos coches abandonados que algunos turistas han comprado para
utilizar en la isla por un periodo corto coincidiendo con sus
vacaciones o con el periodo laboral que pasan en Eivissa y que, una
vez finalizado éste, deciden abandonar en una cuneta o en lugar más
o menos discreto.
En estos casos, tampoco no pueden revender los coches por
irregularidades de cualquier tipo en la documentación. Las
autoridades no pueden hacer nada hasta pasado un periodo mínimo de
un mes desde que el vehículo ha sido abandonado. Los Ayuntamientos
son los responsables de, una vez pasado ese plazo de 30 días,
retirar los vehículos de las cunetas, a no ser que causen molestias
en el lugar en el que han sido o representen un peligro para el
tráfico.
Según la policía, este fenómeno se produce en muchas localidades
turísticas y da una idea de la cantidad de coches con
irregularidades en la documentación que circulan en verano por las
carreteras de la isla.
Pueden no tener seguro el seguro obligatorio, estar a nombre de
un propietario anterior, estar en manos de un conductor carecer sin
permiso de conducción o no haber pasado la Inspección Técnica de
Vehículos.
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