«Siempre he tenido la conciencia tranquila», afirmó ayer el presidente del Govern balear, Jaume Matas, tras conocer el auto en el que el Tribunal Superior de Justicia de Baleares rechaza su imputación y la de su vicepresidenta, Rosa Estarás, en el 'caso Formentera'. Matas hizo estas declaraciones en la sede del PP después de que la llamada «sala de la discordia» del TSJB decidiera ratificar la decisión del juez instructor de desechar la imputación de Matas y Estarás y remitir a un juzgado de Eivissa la causa por una supuesta inscripción irregular en Formentera de votantes emigrados antes de los comicios autonómicos de 1999. «A lo largo de estos prácticamente seis años siempre he tenido la conciencia tranquila y la confianza absoluta en la Justicia», subrayó el presidente del PP balear. Además reiteró que durante todo el proceso ha tenido «como norma» el respeto a las decisiones judiciales. Además, Matas señaló que el auto de ayer viene a sumarse a las decisiones previas en el mismo sentido del propio TSJB y del Tribunal Supremo, que consideró que no había indicios que justificasen la imputación del ahora presidente autonómico cuando era ministro de Medio Ambiente, periodo en el que Estarás fue diputada en el Congreso. Respecto a la actuación de los partidos políticos que le acusaban, PSOE, PSM y EU, el presidente del Govern consideró que deberían reconocer «que se han equivocado». Matas insistió en apelar al respeto a las decisiones de los jueces y afirmó que no guarda «rencor a nadie».

PSIB, PSM y EU señalaron ayer que el 'caso Formentera' no ha terminado y se mostraron «cautos» a la hora de valorar la sentencia, al no conocerla en detalle, al tiempo que expresaron su respeto hacia la justicia. Sin embargo, destacaron que 3 de los 7 magistrados votaron a favor de la imputación de Matas y Estaràs, situación que consideraron como un «claro indicio» de las implicaciones de ambos políticos en el caso. Asimismo, coincidieron en indicar la necesidad de separar entre la parte judicial y la política del asunto. El secretario de Organización del PSIB, recordó, en declaraciones a Europa Press, que el caso «sigue vivo», dado que los juzgados de Eivissa deberán decidir sobre el futuro de otros implicados.

AGENCIAS
Los siete magistrados del Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJB) que han analizado los recursos por el 'caso Formentera' han confirmado el auto del juez instructor, que rechazó imputar al presidente del Govern balear, Jaume Matas, y a la vicepresidenta, Rosa Estarás, en la causa, aunque con tres votos particulares. Fuentes del TSJB informaron ayer a EFE de que la denominada 'sala de la discordia' ha tomado finalmente una decisión y ha rechazado los recursos de las acusaciones particulares, después de que el miércoles deliberaran durante toda la mañana sin alcanzar un consenso. Los jueces, con tres votos particulares (Francisco Javier Muñoz, Fernando Nieto y Antoni Capó), han confirmado todos los extremos del auto del magistrado instructor, Antoni Monserrat, y han rechazado imputar al presidente y a la vicepresidenta del Govern en la causa, que investiga un supuesto delito electoral.

De acuerdo con las mismas fuentes, el TSJB no se ha pronunciado sobre el resto de imputados en el caso, que no son aforados, por lo que ahora tendrá que ser el juzgado de Eivissa el que prosiga con la instrucción. La denominada 'sala de la discordia' se formó tras el empate que se registró en la votación de los cuatros magistrados de lo Civil y Penal que tenían que decidir sobre los recursos presentados por las acusaciones particulares en contra del auto del juez Monserrat. Esa sala no se puso de acuerdo sobre el contenido del auto dictado por el juez instructor del 'caso Formentera', quien no vio indicios de la comisión de un supuesto delito electoral ni por parte de Matas ni por parte de Estarás. Tras rechazar la imputación de los dos máximos cargos del Govern solicitada por las acusaciones particulares ejercidas por el PSOE, PSM y EU y sobreseer de forma provisional la causa en lo que respecta al conseller Josep Juan Cardona, y al alcalde de Manacor, Antoni Pastor, el juez remitió el caso al juzgado de Instrucción número 2 de Eivissa, que es quien se encargará ahora de proseguir con la instrucción.