Los trabajadores de las ambulancias del 061 siguen con deficiencias. Aseguran que hay una sobrecarga laboral en el transporte programado lo que ocasiona retrasos constantes en muchos servicios y, además, tienen unas condiciones precarias en su lugar de descanso que se encuentra junto al servicio de urgencias del hospital.

La sala de descanso que poseen junto al hospital Can Misses aseguran que no reúne las condiciones adecuadas ya que está roto el cristal de la puerta; no disponen de baño con lo que han de recurrir al que utilizan los pacientes de urgencias de Can Misses y tampoco aire acondicionado. La cortina de la ventana es una sábana con el logotipo del Àrea de Salud. El cristal de la puerta se encuentra roto desde hace seis meses.

El cuarto de descanso es el lugar donde se encuentran las llaves de los vehículos, la documentación y las órdenes del trabajo diario de los trabajadores de las ambulancias.

La situación en la que se encuentra el cuarto de descanso de los trabajadores de ambulancias ha sido denunciada en reiteradas ocasiones por los trabajadores e incluso se llevó hace un par de años hasta la Inspección de Trabajo. «Queremos que se arregle», dicen los trabajadores que denuncian las deficientes condiciones laborales.

Las ambulancias de transporte programado tampoco están en buenas condiciones, ya que el escalón lateral de acceso a los pacientes está roto y se ha sustituido por un taburete de plástico. Además, aseguran que una ambulancia de transporte urgente tiene rota la puerta del asiento del copiloto.

El uniforme sigue siendo otro de los problemas de los trabajadores del transporte sanitario ya que el personal eventual no tiene uniformes desde hace un mes y medio.