El barrio de Es Pratet se vio sorprendido ayer por el reventón de una tubería que inundó las inmediaciones de la zona. El incidente, que tuvo lugar a primera hora de la mañana, se solventó con el cierre del agua al mediodía. Según fuentes vecinales, la empresa Aqualia no arreglará la avería hasta mañana por la tarde, debido a no encontrarse ningún tipo de operario. De esta forma más de una veintena de vecinos y varios comercios se vieron afectados por no poder contar con el servicio de agua. Desde la empresa, no pudieron informar sobre el asunto al no contar con el sistema informático.