El PP afirmó ayer en respuesta a las acusaciones de la FSP-PSOE sobre las irregularidades urbanísticas de los ayuntamientos del PP que la campaña electoral ya ha empezado y que los socialistas han recuperado el «más puro estilo dobermann». Con estas palabras el portavoz de la Ejecutiva pitiusa del PP, Miquel Jerez, salió al paso de las «graves acusaciones» de los socialistas.

Jerez aseguró que el ataque del PSOE tiene doble intención. Por una parte, «apuntalar su débil acción de oposición» y, por otro, «esconder la falta de criterio que muestra donde tiene responsabilidades de gobierno». El también diputado balear del PP aseguró, además, que los socialistas «distorsionan» la verdad con «acusaciones infundadas, sin respetar a las instituciones, menospreciando a sus cargos públicos y subestimando la inteligencia de los ciudadanos».

Para el PP, lo más grave son la acusaciones, «sin fundamento alguno», sobre la aprobación de leyes para tapar irregularidades urbanísticas de sus políticos. «No podemos tolerar que se diga que el poder legislativo y ejecutivo está al servicio del ejecutivo. No lo podemos tolerar porque falta al respeto de las instituciones democráticas y atenta contra la independencia del poder judicial», subrayó Jerez, que intuye que, con estas acusaciones, los socialistas tratan de «presionar» a los jueces que instruyen los casos de presuntas irregularidades urbanísticas vinculadas a cargos del PP.