E.R./C.A.
El conseller de Patrimoni del Consell, Joan Marí Tur, aseguró ayer que se le «hará muy cuesta arriba» decir no a la protección del edificio de Sa Graduada si las tres instituciones, Colegio de Arquitectos, Institut d'Estudis Eivissencs y la Universitat de les illes Balears, aconsejan la conservación del edificio. «Basta el informe de una institución para poder actuar», recordó el conseller. En el caso de que los informes no avalen la declaración de bien catalogado, el Consell tendrá que explicar la decisión de no iniciar el procedimiento.

De momento, se cuenta con los informes favorables a la conservación de los arquitectos y del Institut d'Estudis Eivissencs. Un técnico del departamento de Historia de Arte de la UIB se desplazó ayer a Eivissa para inspeccionar el colegio. El técnico visitó el centro, fotografió las cinco aulas cerradas y las instalaciones más nuevas de Sa Graduada.

El conseller de Patrimoni calcula que dispondrá de este informe en un plazo de quince días. «Si no está, llamaré al rector», comentó. Ante el interés que ha despertado la posibilidad de protección del edificio, aseguró que «el Consell tiene las manos libres para hacer aquello que la ley nos ordena y los criterios objetivos nos aconsejan». Para los criterios objetivos serán de «gran utilidad» los tres informes solicitados por el Consell ante la petición de protección del edificio que presentó la Asociación de Padres y Madres de Alumnos de Sa Graduada a mediados de marzo. De esta manera, la APA trata de evitar la demolición del edificio y el traslado del colegio a un solar de la calle Vicent Serra, como figura en el proyecto Eivissa Centre.