Salvar una vida por minutos, llegar en el momento justo y actuar
en el tiempo adecuado fueron los factores que confluyeron de forma
positiva en el accionar del policía turístico, Roberto Sánchez, tan
sólo diez días después de incorporarse al cuerpo de la Policía
Local de Eivissa como agente turístico.
La organización de esta fuerza de seguridad logró que el agente
Sánchez y su compañero de patrulla (con placa nº 150) llegaran a
tiempo para practicarle los primeros auxilios a Catalina
Santandreu, de 79 años, que había perdido el pulso y el resto de
las constantes vitales hacía cinco minutos.
Devolverla a la vida con cinco minutos más de masaje cardíaco y
respiración boca a boca es un trabajo acompañado de la buena suerte
que no siempre sucede en la labor policial cuando atiende este tipo
de casos: «Son las maniobras que me enseñaron en la academia con
ejercicios prácticos y de las que tenía noción por un curso de
buceo que hice en Santa Eulària», señaló Sánchez, que por primera
vez se encontraba con una situación de estas características no
sólo en toda su vida, sino también en los primeros en el escaso
tiempo que lleva trabajando como agente en las fuerzas de
seguridad.
«Me quedé un poco impresionado pero me he alegrado porque
gracias a esta reacción de primeros auxilios, que siempre son
vitales, la señora ahora se encuentra estable, ingresada en la
clínica de Nuestra Señora del Rosario».
Las felicitaciones de sus compañeros y de la familia de Catalina
Santandreu alentaron a este agente que recién comienza un trabajo
del que siempre quiso formar parte: «Vivo desde 1998 en la isla e
hice el curso de policía en Santa Eulària. Cuando termine en
noviembre el turno de policía turístico optaré para ser agente
local».
Los hechos ocurrieron en la pastelería 'Las delicias', y fueron
alertados por dos policías de paisano que tomaban por allí café.
L.Aversa
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