El consell de govern aprobó ayer la firma del convenio entre la
Conselleria d'Educació y el Ayuntamiento de Eivissa para la
construcción de nuevas infraestructuras educativas que incluye una
de las actuaciones que han despertado más polémica, como es la
demolición del colegio Sa Graduada y el traslado del colegio a un
solar de la calle Vicent Serra.
El conseller d'Educació del Govern, Francesc Fiol, confirmó ayer
la aprobación del convenio con el Ayuntamiento de Eivissa y que el
lunes enviará el convenio firmado al alcalde de Eivissa, Xico
Tarrés.
Respecto a la posibilidad de que se declare BIC el colegio, tal
y como solicitan los padres, con lo que el colegio no se tiraría,
Fiol no se atrevió a opinar acerca de este asunto: «Esto sobrepasa
mis competencias. Tengo la solicitud del Ayuntamiento de Eivissa en
la que me piede que lleguemos a un acuerdo en una serie de cosas y
estoy de acuerdo, porque me parece ventajoso para educación». El
conseller recordó que «ha costado mucho trabajo llevar cabo el
convenio, pero parece que estamos todos de acuerdo». En opinión de
Fiol, «el edificio no merece una especial protección, respetando el
asunto sentimental de los que han estudiado allí que tienen un
afecto y un aprecio muy comprensible a este edificio». Respecto al
Consell, que ha pedido informes para saber si el edificio tiene
categoría para ser protegido, Fiol señaló: «Ellos sabrán lo que
hacen».
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