El Centro de Estudios y Prevención de Conductas Adictivas de las Pitiüses (CEPCA) ha iniciado un cursillo de formación para mediadores con el quese pretende paliar la alta incidencia del consumo de drogas en Formentera y la precocidad en el inicio a la misma. «El curso de mediadores va dirigido a mucha gente, pero fundamentalmente a todos aquellos que dentro de su ámbito, tanto laboral como personal, piensan que en materia de prevención de drogodependencias pueden hacer algo positivo». Así definía ayer Belén Alvite, la responsable del CEPCA, el curso al que se han apuntado una docena de personas y que si bien en Eivissa ya se ha realizado en diversas ocasiones es la primera que se hace en Formentera.

Al mismo se han apuntado trabajadores del área de Serveis Socials o del departamento de Cultura del Consistorio, Policía Local y algunas madres a título personal, en especial «gente joven que sin tener una profesión dedicada específicamente a estas labores se sienten motivadas a colaborar en estas tareas», dijo Alvite.