Los transportistas dicen que la subida de carburantes retraerá la inversión

La patronal FEBT debatió en asamblea general la implantación del denominado «céntimo sanitario» o impuesto de hidrocarburos planteado por el Govern, manifestando la asamblea su total oposición a esta medida, ya que incrementará los costes de explotación, por lo que piden al Ejecutivo autonómico que les exonere de su aplicación.

Jover entregó a la FEBT un borrador de un informe sobre cómo estructurar las compensaciones al sector del transporte en las Islas. Dicho informe será analizado por los servicios jurídicos de la patronal del transporte para determinar su impacto, aunque el sentir de la patronal es que el nuevo impuesto sobre hidrocaburos, que posiblemente se implantará en enero de 2006, «no afecte a un sector estratégico para la economía de las Islas y la propia industria turística balear».

La consellera Cabrer, según los transportistas, les expuso los motivos de la implantación de este nuevo impuesto, que tiene como objetivo recaudar fondos para paliar el déficit fiscal existente con el Estado que impide afrontar la mejora de la infraestructuras de las Islas en condiciones.

«La consellera nos ha indicado que todavía no es seguro que se vaya a aplicar este impuesto sobre los hidrocarburos».