La compañía eléctrica Gesa anunció ayer que investigará el origen de las vibraciones que afectan a los institutos Blanca Dona e Isidor Macabich que, presumiblemente, son originadas por la proximidad a la central que abastece de energía eléctrica a la isla de Eivissa. «Investigaremos hasta el final el origen y cómo paliar los ruidos», aseguraron ayer desde Gesa.

El jefe de medioambiente de Gesa, Carlos Bujosa, y el responsable de operaciones de la central, Rafael de las Heras, se reunieron ayer con los responsables de los institutos Blanca Dona e Isidor Macabich y los técnicos de medioambiente del Consell para exponerles las actuaciones que se van a acometer para causar el menor impacto posible entre la población escolar y a Puig d'en Valls, zona próxima a la central.

Las vibraciones en los institutos es un hecho habitual desde hace años pero, a partir de noviembre, incrementaron las molestias de manera acusada. Los centros educativos expusieron a Gesa, a través de una carta, las molestias ocasionadas y se convocó esta reunión.

Gesa expuso en la reunión a los afectados que les comuniquen si detectan un aumento de las vibraciones. Además de los ruidos procedentes de Gesa, hay unas obras que se están haciendo en las inmediaciones.

Gesa colocará unos equipos de insonorización para paliar el ruido. La compañía eléctrica cuenta desde el mes de diciembre estos equipos que no se han podido instalar ya que se necesitan personas cualificadas para montarlas. Las obras están previstas que se inicien a partir del 28 de enero. La compañía estudiará, paralelamente, si con la instalación de los equipos de insonorización desaparece el ruido o si prosiguen las molestias a los vecinos.