La junta insular de Eivissa y Formentera del Colegio de Médicos de Balears reclama más autonomía para la toma de decisiones que afectan a intereses propios de cada isla, como es el caso de la construcción de la nueva sede, que fue rechazada en la asamblea general extraordinaria celebrada el pasado 13 de octubre en Palma.

En un escrito firmado, por Marcelo Fernández, presidente de la junta insular; Antonio Comas, secretario; Carlos Rodríguez, interventor y los vocales Eduardo Escudero y Antonio Cordero, exponen su malestar por la situación desencadenada a consecuencia de la nueva sede del colegio, que se rechazó en una asamblea extraordinaria celebrada el 13 de octubre. «Pensamos que siendo una asamblea general para todos los colegiados y para votar un tema tan importante como era la construcción de una nueva sede lo lógico hubiera sido votar en cada una de las islas, dando así la misma oportunidad a todos aquellos colegiados que quisieran ejercer su derecho a voto», dice textualmente el escrito donde exponen la situación (ver pág. 20).

En la asamblea de octubre se obtuvo 31 votos a favor de la construcción y 28 en contra, pero no se consiguió el respaldo necesario para construir la nueva sede ya que eran necesarias las dos terceras partes de compra. En la reunión se rechazó, por mayoría, la venta del solar de Puig des Molins en el que estaba previsto el nuevo edificio. No obstante, se ha convocado una nueva asamblea general ordinaria que tratará este mismo punto, pese a que ya se votó en contra.

Ante toda esta situación, la junta insular está dispuesta a pedir más competencias y plantear este asunto ante el consejo oficial del Colegio de Médicos de España. Los médicos de Eivissa exigen que los estatutos de la institución doten de más autonomía a Eivissa, ya que en la isla hay 400 colegiados.