El Ayuntamiento de Eivissa vuelve a denunciar la discriminación que sufre por parte del gobierno del Consell, que esta vez le exige el pago de 23.000 euros (casi cuatro millones de pesetas) por utilizar la carpa anexa al Recinto Ferial durante un día para la organización de la fiesta de Nochevieja. El año pasado ya hubo una fuerte polémica por este asunto, aunque esa vez fue por la negativa del Consell a cederle las instalaciones porque la fiesta de fin de año coincidía con la feria Diverespai. Este año, sin embargo, el Consell pone a disposición del Consistorio la nueva carpa anexa.

La concejal de Fiestas, Sandra Mayans, asegura que es «vergonzoso» que el Consistorio tenga que pagar 23.000 euros por utilizar un día la carpa. El alquiler de la carpa asciende a 17.500 euros, a lo que se añade en la factura el servicio de seguridad de dos vigilantes durante la fiesta (720 euros) y el de otra persona para que controle el material durante los días de montaje y desmontaje (820 euros), los servicios de limpieza (1.476 euros) y mantenimiento (360 euros) y el consumo energético (600 euros).

«Nos gustaría saber si el Consell también cobra a los otros municipios por hacer uso de sus instalaciones, que se entiende que son de todos los ciudadanos», lamentó. Mayans entiende que a una empresa se le cobre por el uso de la carpa, pero no así a la administración, que, recalca, actúa sin ánimo de lucro para programar un acto lúdico para la población. Recuerda, asimismo, que para cualquier acontecimiento deportivo que organice el Consell, por ejemplo, el Consistorio pone a su disposición el servicio de la Policía Local, pero luego «no le pasa una factura con las horas extras de estos trabajadores», que corre a cuenta de las arcas municipales. Critica, además, que el Ayuntamiento de Eivissa no ha recibido ni un euro de ayuda del Consell para la celebración de las fiestas de este año (Carnaval, Sant Joan, Festes de la Terra,...), a diferencia de otros municipios que han recibido dinero para organizar conciertos.