El alcalde de Eivissa, Xico Tarrés, salió ayer al paso de las declaraciones realizadas el pasado jueves por el conseller balear de Medi Ambient, Jaume Font, criticando la pasividad del Ayuntamiento respecto a la construcción de la nueva depuradora y aseguró que ya hay una propuesta concreta para emplazar la planta que tanto los técnicos municipales como el Ibasan consideran la más adecuada y que también ha recibido el visto bueno de Font.

Según detalló el concejal de Medio Ambiente, Juan Rubio, «en la última reunión de la comisión de coordinación de la depuradora se entregó al Consistorio un informe del Ibasan en las que se valoraba cuatro propuestas (una de ellas la presentada por el Consell) y se consideraba la tercera la más apropiada para albergar la instalación». El terreno, según se puede apreciar en los planos que marcan todas las alternativas, está ubicado en Santa Eulària, entre las zonas de Ca Na Negreta y Puig de Ca Na Ribes. A continuación se acordó solicitar a la conselleria balear un informe previo al estudio de impacto ambiental que le corresponde hacer a Medi Ambient para comprobar que la ubicación propuesta no estaba afectada por ninguna figura de protección y se podían iniciar los trámites para la compra o expropiación del solar. El Consistorio recibió a finales de agosto respuesta favorable de un técnico y de Font que confirmaba que esta alternativa no estaba en zona protegida.

A principios de septiembre la corporación se dirigió al Consell para pedirle que convocara una reunión con todos los ayuntamientos a los que da servicio la depuradora (Eivissa, Santa Eulària y Sant Antoni) para aclarar «lo que tenía que poner cada institución y formalizar un convenio para la compra del mismo». Tarrés explicó que todavía no se ha recibido respuesta de la máxima institución pitiusa, que «es a la que le toca coordinar esta situación».

La conselleria balear de Medi Ambient insistió ayer en que si el tema de la depuradora está paralizado es porque el Consistorio no cede el solar. Fuentes de Medi Ambient explicaron que lo único que se ha recibido del Ayuntamiento es un documento con un mapa en el que se marcan las tres posibles zonas y se señala la tercera como la más adecuada sin presentar ningún informe técnico sobre las propuestas. Ante la falta de concreción, la Comisión Balear de Medi Ambient, que es quien tiene que dar el visto bueno al solar, va a pedir al Consistorio que aporte los datos concretos de cada alternativa.