El pequeño gran mago Jorge Blass aterrizó ayer por la mañana en
Eivissa en vistas a veranear durante la próxima semana en un hotel
rural de la isla.
Procedente de Madrid y después de unas vacaciones en Canarias y
Tenerife, el joven de 24 años decidió pasar siete días en compañía
de sus amigos «para salir de noche y también descansar».
El mago Blass aseguró a su llegada que «la magia es su pasión
desde muy pequeño» como una inquietud que nació dentro de él «sin
influencia de mis padres o de mi familia».
En su biografía Blas cuenta como empezó con esta carrera que le
ha llevado a recibir entre otros premios: 'La Varita Mágica de Oro'
con tan sólo 20 años de la mano del príncipe Rainiero en el
Festival Internacional de Montecarlo, y el 'Premio al mejor mago
del año', otorgado por la Sociedad Española de Ilusionismo en el
año 1998.
Su historia con la magia comienza cuando a los seis años se
fascinó delante del televisor cuando un mago rompía y recompoñía
una carta. Con la llegada de las navidades, recibió un regalo que
dio su primer paso en su formación: una caja mágica que le enseñó
sus primero juegos martirizando a familiares y amigos hasta lograr,
después de cinco años, que no huyeran despavoridos. Con tan sólo
doce años, el pequeño Jorge descubre la escuela de magia de Juan
Tamariz y recibe las primeras clases de la mano de su maestro
Joaquín Navajas.
En la actualidad, y después de estos días de descanso que Jorge
Blass pasará en la isla, comenzará con su gira de espectáculos por
Madrid y Barcelona con presentaciones que responden al título de
'Imagina'.
Solo, lleno de maletas y con una sonrisa, el joven Blass llegó a
la isla por primera vez para disfrutar junto a los suyos «que
aterrizarán hoy», de este agosto ibicenco que se encuentra en el
ecuador de la temporada.L.Aversa
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