Juan Mestre28/04/04 0:00
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El titular de Turisme, Joan Flaquer, defendió ayer en la Cámara balear la necesidad de que no se hable más de «problemas medioambientales» de Balears para no deteriorar la imagen turística de las Islas en el exterior. Durante la interpelación presentada ayer por los socialistas sobre la imagen turística de Balears, Flaquer reclamó que la oposición deje de hablar de «involución medioambiental en Balears» y aseguró que otros destinos turísticos rivales «tienen problemas más graves y se callan». Por este motivo, Flaquer fue muy claro y asumió que Balears padece «una situación de debilidad» ante los mayoristas turísticos, cuyos representantes han vuelto a solicitar a los hoteleros que bajen sus precios de cara a la temporada turística. En opinión de Flaquer, la postura ahora de los mayoristas está condicionada «por la nefasta política turística que se llevó a cabo en Balears durante los pasados cuatro años». En este sentido, el titular de Turisme acusó al anterior Govern de impulsar una campaña en contra de los turistas. Flaquer recordó que el anterior conseller de Hisenda, Joan Mesquida, recomendó a los visitantes que no viniesen a Balears si no podían pagar la ecotasa. Y rememoró que la anterior consellera de Medi Ambient, Margalida Rosselló, pidió públicamente que dejasen de venir 3 millones de turistas a las Islas.

Por su parte, el socialista Celestí Alomar, ex conseller de Turisme, acusó a Flaquer de adoptar una postura de «debilidad» y «cierta sumisión» ante los operadores turísticos y aseguró que cuando él dirigía la Conselleria de Turisme nunca un mayorista turístico pidió una bajada de precios. Alomar también defendió que en Balears pueda existir un debate sobre la involución medioambiental.

«Los mayoristas turísticos siempre han pedido que se bajen precios, pero usted -en alusión a Alomar- estaba peleado con ellos y no pudo sentarse a negociar porque no se fiaban», contestó Flaquer durante la interpelación del diputado socialista. A lo largo del debate, Flaquer recordó que la oferta del «todo incluido» es legítima y dijo que en contra de esta alternativa turística «no se puede luchar». «Nosotros no vamos a demonizar a los turistas como ustedes hicieron durante cuatro años», recalcó Flaquer.

Sobre la oferta del «todo incluido», Flaquer subrayó que el 80 por ciento de los turistas que vienen a Balears lo hacen con paquetes turísticos organizados. Y por ese motivo la oferta de «todo incluido» permite calcular fidedignamente a las familias el coste que tendrá sus vacaciones.

Antes del debate de la interpelación, Flaquer informó que el mercado alemán está creciendo un 8 por ciento.