El Govern balear trabaja ahora en la localización de los puntos
de mayor consumo, según explicó a este periódico el conseller
balear de Indústria i Energia, José Juan Cardona. El plan previsto
pasa por reducir la carga de la demanda en momentos puntuales del
verano de mayor demanda para evitar caídas del sistema eléctrico
que causan, cada año, un perjuicio muy grave a la industria del
turismo.
El Ejecutivo autonómico aún tiene que plantear esta iniciativa a
los ayuntamientos. «No se trata de una ley, sino de la voluntad de
los ayuntamientos para evitar los apagones», asegura Cardona. El
conseller explica que los técnicos pueden detectar donde se produce
una sobrecarga de la red y, en función de ello, actuar para evitar
problemas en el sistema. Por ejemplo, según Cardona, si los
mecanismos de control aprecian indicios de una sobrecarga eléctrica
en el puerto de Sant Antoni, los técnicos podrían ponerse en
contacto con el Ayuntamiento para que apague durante un tiempo las
luces del Passeig de ses Fonts y evitar así el riesgo de que se
produzca un apagón. «La idea es llegar a un acuerdo con cada
ayuntamiento para que designe a una persona a la que se la pueda
llamar en caso de peligro de sobrecarga en una zona concreta de la
red», explica. El último apagón general de las Pitiüses tuvo lugar
en agosto de hace dos años. En este caso, no fue por una
sobrecarga, sino por un rayo que cayó sobre una línea. La avería
dejó sin luz a las dos islas durante 15 minutos.
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