El Grupo Progressista del Consell Insular también piensa presentar
ante Fiscalía una denuncia por la destrucción desafareig y la
caseta anexa al molino de agua de Villa Abel, en la zona de Can
Raspalls (Sant Jordi), protegido mediante la figura de Bien
Catalogado al final de la pasada legislatura. El Pacte ya presentó
recientemente una denuncia ante el fiscal del Tribunal Superior de
Justicia de Balears por las supuestas irregularidades cometidas por
el conseller insular de Patrimonio, Joan Marí Tur, en la
construcción de una casa en una finca de su propiedad en el ámbito
del parque natural de Cala d'Hort. E safareig y la caseta anexa al
molino se destruyeron por las obras de construcción de nuevos
viales en Can Raspalls. Eso sucedió después de que el anterior
gobierno del Pacte iniciara el expediente de protección de 33
molinos de agua del Pla de Sant Jordi y sus instalaciones
anexas.
Antes, el gobierno del Pacte instó al Ayuntamiento de Sant
Josep, a raíz de la denuncia de un vecino, a que paralizase las
obras por el desmantelamiento de las aspas del molino. Al parecer,
un golpe de viento tiró una parte de las aspas y, según el
encargado de la obra, se retiró el resto para evitar que pudiera
caer sobre alguna persona. En el momento de la denuncia y de la
orden de paralización de las obras tan sólo se habían desmantelado
las aspas, que, tal como comprobó el celador de Patrimonio, se
conservaban desmontadas en el pie del molino. Sin embargo, los
operarios, una vez se retomaron las obras, se llevaron por delante
esafareig.
El Consell pidió la paralización de las obras el pasado 15 de
mayo. El molino ya no contaba entonces con las aspas del molino. El
23 de mayo se inició el expediente de protección y fue el 21 de
julio cuando el grupo progresista presentó una denuncia por la
destrucción desafereig y la caseta anexa al molino, protegidos por
la figura de Bien Catalogado. El Pacte recuerda que la ley de
Patrimonio determina que la incoación del expediente comporta «la
aplicación del régimen de protección establecido». El Código Penal
prevé penas de prisión de seis meses a tres años, multa de 12 a 24
meses y, en todo caso, inhabilitación especial para profesión u
oficio por tiempo de uno a cinco años para los que derriben o
alteren gravemente edificios singularmente protegidos por su
interés histórico, cultural o monumental. Por ello, el grupo
progresista del Consell considera que la destrucción desafareig
podría ser constitutivo de un delito penal en contra del patrimonio
histórico.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.