Rafael Pons, secretario general de USO Balears, acudió ayer a
Eivissa para participar en unas jornadas de formación sindical en
las que han tomado parte unos 30 delegados de todos los sectores en
los que el sindicato cuenta con representación. La visita también
tenía como objetivo establecer la comisión gestora del sindicato,
después de que el anterior secretario de la formación en las
Pitiüses, Antonio Llanos, presentase su dimisión en enero.
El sindicato insistió en que la marcha de Llanos no significa
que hayan dejado de representar a los trabajadores y de ofrecer los
servicios de siempre. Sin embargo, Pons admitió que ha habido bajas
tras la marcha de Llanos aunque matizó «que en el terreno de la
militancia no ha habido ninguna pérdida».
El secretario general apuntó que en la actualidad no existe
vinculación profesional con Antonio Llanos, quien además de ser
secretario general de USO era abogado en el sindicato. Pons asegura
que la formación «respeta» la decisión de Llanos, al que define
como «persona significativa dentro del ámbito de Balears».
Lo importante ahora para el sindicato es salir adelante
«fundamentándose en sus bases». Con respecto a los cambios en un
futuro cercano, Pons aseguró que pondrán el énfasis «en que el
sindicato salga adelante con la fuerza de la unión y el proyecto
sindical de siempre». La comisión gestora será «muy participativa y
la integrarán unas quince personas». Regirá el sindicato durante un
año, hasta que se celebre el congreso. USO cuenta con 600 afiliados
en las Pitiüses.
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