La agencias de viajes de las Pitiüses han recibido desde diciembre decenas de quejas diarias por la supresión de ofertas de barco en la línea entre Eivissa y Denia que realiza la compañía Baleària. Vinculan, además, la retirada de los descuentos con el hecho de que Baleària realiza desde finales de 2003 el trayecto en condiciones de monopolio. Iscomar, la naviera que cubre la misma línea, retiró el barco que disponía el 11 de diciembre tras sufrir una avería en sus hélices.

Antes del accidente, las agencias consultadas vendían una oferta que suponía pagar 127'30 euros (21.181 pesetas) a un residente con coche por un trayecto de ida y vuelta. En diciembre se eliminó la oferta por lo que el precio por el trayecto de ida y vuelta para una personas residente quedó en 302,28 euros (50.295 pesetas), de los que 56,28 son por el pasajero y 246 por el vehículo.

En los centros de venta de billetes reciben quejas «todos los días» por parte de clientes que «no se explican el motivo de la retirada de las ofertas», asegura una de las agencias consultadas. En otra, el personal se muestra «harto» de tener que lidiar con este problema. «Desde que comenzó el año todo son protestas: unas por la retirada de estos descuentos y otras por la declaración de interés público de los vuelos con Palma, que ha supuesto la retirada de las ofertas», señalan. En estas empresas aseguran que comprenden que la decisión de poner o no ofertas es de la naviera, que no tiene obligación al respecto. A pesar de ello, consideran un agravio para el cliente que se haya llegado a esta situación. «Al final, el único perjudicado es el cliente», insisten. Las agencias también reciben quejas porque la línea la está cubriendo un barco «lento», ya que el rápido ha sido retirado por una parada técnica. «No tiene sentido pedir estos precios por un servicio lento», dicen.

Iscomar tuvo que posponer la vuelta a la actividad del buque «Carmen del Mar», prevista para enero. El barco está fuera de servicio desde el pasado 11 de diciembre de 2003, cuando sufrió un accidente en el puerto de Denia que destrozó sus hélices. Juan José Sánchez, responsable de Iscomar en Eivissa, explicó que la reparación de la parte afectada estaba resultado más complicada de lo que parecía, ya que han tenido que encargar la fabricación de varias piezas que ya no están en el mercado.

La compañía espera que la avería pueda estar totalmente reparada entre finales de febrero y principios de marzo. Una vez reparado el barco volverá a la actividad.