Los 30 alumnos del módulo de cocina del instituto Isidor Macabich de Eivissa iniciaron ayer finalmente las clases prácticas en la recientemente inaugurada Escuela de Hostelería de Blanca Dona después de más de un retraso.

Este es el primer curso en el que se utiliza las cocinas de Blanca Dona para los módulos de cocina, ya que el año pasado se realizaron las prácticas en un hotel. La proximidad del instituto Isidor Macabich con el centro de Formación de Blanca Dona, lugar de la sede de la Escuela de Hostelería, era una gran ventaja para los alumnos.

La demora en el comienzo de las clases ha supuesto la protesta de los alumnos que durante varios días desplegaron una pancarta en la entrada del instituto reclamando estas instalaciones para poder realizar sus prácticas. «Volem cuina», rezaba la pancarta reivindicativa. Después de un mes de clases teóricas sobre cocina a los alumnos de los dos módulos, los estudiantes se mostraban ayer dispuestos a iniciar medidas de presión si las instalaciones de la Escuela de Hostelería no estaban acondicionadas para comenzar las clases. «Desde el 15 de octubre nos dijeron que estarían hechas y las obras tenían que estar acabadas el pasado 31 de agosto», comentaba ayer uno de los profesores.

Finalmente, el Servei d'Ocupació de les Illes Balears confirmó ayer que las instalaciones ya estaban acondicionadas para que los alumnos pudieran empezar a formarse y descartar las movilizaciones.