El gerente de la fundación Banco de Sangre y Tejidos de las Illes Balears, Víctor Gistau, calificó ayer como espectaculares las cifras de donaciones de sangre que se registran en Eivissa y Formentera con respecto al resto de España. Gistau, que se desplazó hasta Santa Eulària, donde se instaló ayer la unidad móvil de extracción de sangre, explicó que en 2002 «se batieron todos los récords al incrementar las donaciones un 42,4 por ciento», aumento muy superior a los que se registraron en el resto de la comunidad. De las 40.000 bolsas de sangre que se recogieron durante el año pasado en torno a 4.000 procedían de las Pitiüses, según los datos que aportó el gerente. Gistau aseguró que el objetivo de la Asociación de Donantes de Sangre de Eivissa y Formentera para este año es superar estas cifras.

De momento, el Banco de Sangre de Balears ha decidido que para 2004 la unidad móvil de extracción de sangre se desplazará hasta las Pitiüses dos veces, cuando hasta ahora sólo lo hacía una vez al año. Asimismo, la fundación está estudiando la posibilidad de incrementar la aportación económica que destina a Eivissa y Formentera, como reclama el presidente de la asociación pitiusa de donantes, Antonio Sepúlveda.