El centro de día de Cas Serres, que celebró ayer una jornada de puertas abiertas con motivo de la celebración mañana del Día Mundial del Alzheimer, tiene una lista de espera de diez personas que esperan una plaza en este servicio. El centro con una capacidad de 20 plazas atiende a 15 personas afectadas por esta demencia en una segunda y tercera fase.

El alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa que altera el funcionamiento cerebral causando trastornos de la memoria, del pensamiento y del comportamiento. Afecta a un diez por ciento de la población mayor de 65 años, lo que sería unas 1.500 personas en las Pitiüses, aunque no hay ningún registro actualmente sobre el número de afectados de la enfermedad.

Esta jornada de puertas abiertas contó con la presencia del presidente del Consell, Pere Palau, y el director insular de Bienestar Social, Vicent Serra, que reconocieron que las necesidades de la población «no están cubiertas ahora, pero si lo estarán dentro de tres o cuatro años cuando estén construidas las residencias de Sant Antoni y Santa Eulària, con 90 plazas cada una». Palau recordó además que está previsto construir un centro de día en el mismo solar donde se ubicará el hospital de Formentera.

El programa de actividades del centro de día tiene como objetivo mantener y estimular las capacidades de los usuarios, tanto las físicas, psíquicas como sociales.

La jornada de puertas abiertas contó con la presencia de algunos familiares de enfermos que mostraban su satisfacción por el servicio. «Los familiares están muy contentos. Uno de ellos contaba emocionado como había vuelto a ver a sonreir a su pareja afectada por la enfermedad», relató un miembro de la Asociación de Familias, que acudió al acto.