Muchos de los inmigrantes que viven en la isla no cuentan con ningún tipo de ingreso, según los datos del Programa de Atención al Inmigrante de Cáritas durante el año pasado. De los 385 inmigrantes atendidos el año pasado, 226 no tenían ningún ingreso.

Cáritas es uno de los puntos de referencia de este colectivo que se desplaza a Eivissa. De este modo, es fácil de entender la falta de empleo ya que la mayoría de los que recurren a este organismo son recién llegados y, en muchas ocasiones, no han tenido tiempo de buscar empleo. Es muy bajo el número de personas que tienen ingresos fijos, una situación condicionada por las características del trabajo en la isla ya que al estar relacionado con el turismo su ocupación es temporal.

De los 385 usuarios atendidos el año pasado, 278 estaban en paro de manera temporal y sólo 17 tenían trabajo estable. Los inmigrantes también tienen problemas a la hora de recibir un salario por un trabajo. En la memoria se alude a este hecho: «Muchos (...) han llegado a nuestra entidad exponiendo que después de haber trabajado varias horas o varios días, realizando las actividades más diversas, no han percibido la remuneración correspondiente a su trabajo».

Los principales problemas con los que se encuentran estos extranjeros al llegar a Eivissa son similares a los de años pasados: el escaso trabajo de duración prolongada y la vivienda, además de la situación de irregularidad en la que están muchos de ellos. Sin embargo, durante el año pasado se detectaron nuevos problemas relacionados con la salud, sobre todo problemas mentales. «El hecho de estar lejos de sus países y sus familiares genera una sensación de soledad que, en muchas ocasiones, desemboca en depresiones graves y serios trastornos psicológicos», recoge la memoria.

El número de inmigrantes atendidos el año pasado, 385, es inferior a los contabilizados en 2001 con 413 personas atendidas. Cáritas atribuye este descenso a que durante el año pasado los inmigrantes del municipio, tanto empadronados como no, fueron atendidos por los servicios sociales del municipio. Una vez que se establecieron los criterios de atención desde los servicios sociales municipales, Cáritas destinó sus recursos a aquellos que siguen sin posibilidades de recurrir a alguno de los servicios.