El concejal de Gobernación del Ayuntamiento de Sant Antoni, Juan Pantaleoni, se mostró ayer predispuesto a tener una reunión con la asociación de residentes senegaleses aunque no admitirá la venta ambulante en el municipio. «No tengo ningún problema en recibirles, pero desde que tomé posesión, el día 15, no tengo constancia de ninguna petición. Estamos en contra de la venta ambulante y no lo vamos a aceptar de ninguna manera», declaró el concejal.

Pantaleoni subrayó que no hay persecución del colectivo senegalés sino que prohíbe la actividad ejercida por este colectivo y otros: «Perseguimos a los que venden frutas y verduras por las playas, todo tipo de venta ambulante, no por el hecho de que sean extranjeros o senegaleses. No lo aceptaremos».

Las posibilidades de este colectivo en Sant Antoni son escasas, ni siquiera pueden estar integrados en un mercadillo, puesto que el único existente es de productos artesanales. «Si se llega a un montar un mercadillo como el de es Canar tendrán el mismo derecho que cualquier otro ciudadano que cumpla los requisitos que se pidan», dijo. Sin embargo, no comparte que se ponga un mercadillo sólo para senegaleses. «No soy partidario de crear un gueto. Si se monta algo tiene que ser atractivo para Sant Antoni y no para solucionar una problemática particular», añadió el concejal. Recordó que otros compatriotas suyos tienen alquilados locales donde se dedican al comercio. «Pero en la calle no queremos y por mucho que se diga se ocultan otras actividades», señaló.

El Ayuntamiento de Eivissa, por su parte, no ha querido pronunciarse sobre este asunto hasta que se reúna el concejal Roque López con el colectivo de senegaleses para abordar esta problemática.