La directora del colegio Vara de Rey de Sant Antoni, Josefa Gil, advirtió ayer de que el colegio tendrá problemas para atender toda la demanda de cara al curso próximo, ya que se ha aumentado el número de alumnos por aula en un centro que se ha quedado pequeño y que necesita un traslado a otro lugar o bien una ampliación. «Hay muchos alumnos y el espacio se ha quedado pequeño», dijo. Para el curso próximo está previsto que haya dos grupos de 29 alumnos en cada aula, otra con 30 y una tercera con 32 alumnos. En infantil de tres años, una clase contará con 22 alumnos. Educación aconseja que el número de alumnos no exceda de 25, un número menor si es de infantil.

El colegio Vara de Rey es uno de los centros más antiguos del municipio que se encuentra situado en el núcleo urbano de Sant Antoni. Rodeado de edificios, la posibilidad de crecimiento es prácticamente imposible. «El claustro de profesores ya dijo que era necesario un centro nuevo», relató la directora ante esta vieja reivindicación de la comunidad educativa.

El centro presenta muchas deficiencias de mantenimiento: las normas de seguridad no se cumplen en el patio de infantil; hay que tratar las humedades y pintar; limpieza y desinfección a fondo del todo edificio y los muebles; renovar el sistema de calefacción, ya que el invierno pasado tuvieron problemas por su deficiente funcionamiento, entre otras necesidades.

La directora envió un escrito hace un mes al Ayuntamiento de Sant Antoni donde exponía las necesidades de revisar paredes, techos y el tejado por parte de los servicios técnicos municipales y emitir un informe técnico del estado general del edificio, así como de los puntos que pueden ser peligrosos.

La ampliación de espacio para desarrollar las tareas educativas con normalidad constituye una de las peticiones más importantes, ya que no disponen de biblioteca ni gimnasio, ni aulas de desdoblamiento. En los pasillos se han tenido que habilitar aulas por la falta de espacio. La situación es tal que la directora, el jefe de estudios y la secretaria se ven obligados a compartir un despacho.