Dos 'drag queens' posan en uno de los stands de Gay-Fun-Ibz, un simposio que se celebra en el recinto ferial del Consell sobre el turismo homosexual, en expansión.

Quien acuda con prejuicios al certamen «Gay-Fun-Ibiza», que abrió ayer sus puertas en el recinto ferial, se llevará una sorpresa. Si bien la cita incluye oferta de ocio y diversión al más puro estilo del «ambiente», también se van a encontrar con una oferta profesional de tiendas de ropa, joyerías, restaurantes, touroperadores y agencias de viajes que constatan que, lejos de ser anecdótico, el turismo gay y lésbico ha adquirido proporciones inimaginables hace unos años. La cita se prolonga hasta mañana domingo y el horario de apertura es de 19,00 a 02,00 horas de la madrugada.

Prueba de las dimensiones que ha alcanzado el turismo gay y lesbiano la dejaron ayer los participantes en el simposio de apertura. Robert Wilson, director ejecutivo de la Asociación Internacional de Viajes para Gays y Lesbianas, fue contundente al destacar que el turismo gay «no se asusta con acontecimientos como el 11 de septiembre o las enfermedades» como la neumonía asiática. «Viajar es una de las actividades que más gusta a este colectivo» que, recordó, «cuenta con un alto poder adquisitivo» y la ventaja de carecer de vínculos familiares directos «lo que le da libertad en el tiempo para viajar cuando quiere». Wilson comentó que, al contrario de lo que está sucediendo con el turismo de masa en claro descenso este año, el de gays y lesbianas «ha experimentado un aumento del 50 por ciento».

La oportunidad de negocio es tanta que agencias de viajes y touroperadores convencionales están empezando a abrir paquetes específicos para este tipo de turismo. Prueba de ello es la presencia en esta feria de Halcón Viajes además de otras agencias más específicas. En la actualidad España ocupa el quinto puesto en preferencias dentro del mercado americano gay y lesbiano. Juan Manuel Rubio, concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Eivissa, actuó de anfitrión del encuentro y valoró como «muy positivo» el hecho de que se realicen este tipo de ferias en Eivissa, una isla que resulta muy atractiva para este tipo de turismo, a pesar de la creciente competencia de las islas griegas y Sitges.