La playa de Platja d'en Bossa ha sido elegida junto a otras 39 en España (una en Mallorca) para la puesta en marcha de un pionero plan de calidad promovido por el Instituto de Calidad Turística Española (ICTE). Sant Josep ( hay 700 metros de playa dentro del término municipal de Eivissa) ha presentó un segundo proyecto, que no fue seleccionado y afectaba a cinco playas en la zona de Cala de Bou que pretendía participar como una sola unidad.

El concejal de Turismo, Vicent Torres, presentó ayer junto al presidente de la Federación hotelera de las Pitiüses, Pedro Matutes, esta experiencia piloto. Torres aseguró que Sant Josep es una de las 40 playas donde se realizará un estudio para establecer la normativa de lo que debe ser un nuevo sello de calidad turística, que después se podrá aplicar a cualquier playa.

«La iniciativa parte del Instituto de Calidad Turística», el mismo que otorga las Q de calidad a los establecimientos hoteleros, y su objetivo es «conseguir establecer unos mínimos que deberán cumplir las playas urbanas españolas». A partir de ahora, dijo Torres, «los técnicos del Consistorio comenzarán a realizar un trabajo de campo dentro de la playa en el cual se recabará información sobre el entorno, las características del municipio, el tipo de turismo que las visita, las infraestructuras que contiene y el tipo de vigilancia y limpieza que se lleva a cabo».

La primera fase del proyecto, la de recogida de datos, se desarrollará durante los meses de abril y mayo, mientras que el verano se aprovechará para la redacción del reglamento y será después cuando la playa podrá optar después a obtener el sello de calidad, si cumple los parámetros mínimos establecidos. El Instituto para la Calidad Turística Española pone a disposición del Consistorio una empresa consultora de asistencia técnica.