La mancomunidad insular que gestiona el matadero de Eivissa reclamó
ayer por escrito al Consell Insular que subsane las deficiencias
detectadas en la nueva línea de sacrificio de aves, que se rompió
el mismo día que se puso en marcha hace una semana.
La mancomunidad califica, en su escrito, de «erróneas» las
declaraciones que realizó el lunes el conseller insular de
Agricultura, Vicent Tur, responsabilizando a los encargados del
matadero y a la Asociación de Productores de Aves del mal
funcionamiento de las infraestructuras.
El presidente de la mancomunidad, Vicent Torres, insistió ayer
en que los problemas del matadero de aves no son imputables al
desconocimiento del funcionamiento de las instalaciones, como dijo
Tur, y puso como ejemplo el hecho de que las máquinas trabajaron
sin problemas con los primeros mil pollos que se sacrificaron.
Vicent Torres recordó que las obras todavía no han sido
entregadas a la mancomunidad y que el Consell es el encargado de
recepcionarlas con las debidas garantías.
El presidente anunció que es probable que hoy pueda volver a
funcionar toda la maquinaria. A través del escrito, la mancomunidad
ha solicitado que esta vez esté presente el técnico director de las
obras, Vicente Planells, para comprobar in situ las deficiencias
denunciadas por la mancomunidad y si realmente existe una
incorrecta manipulación de la maquinaria. Una de las deficiencias
técnicas más destacadas es la escasa potencia del compresor de aire
instalado, que no tiene fuerza suficiente para realizar el vaciado
de tripas y sangres.
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