El asfalto del primer cinturón de ronda será repuesto este año, según anuncia la Conselleria.

Remendar y acabar. Es la consigna de la Conselleria insular de Xarxa Viària para este año electoral, en el que de momento no hay previstas intervenciones espectaculares y el principal objetivo es que, al menos, las principales carreteras no parezcan quesos de gruyer.

Vicent Tur también augura que antes del verano se podrá adjudicar la construcción de la rotonda de Sant Rafel, un proyecto cuya cuantía ha sido notablemente incrementada desde que su adjudicación quedó desierta. De los 73 millones de pesetas iniciales se ha pasado a alrededor de 540.000 euros, un aumento de un 33 por ciento.

El titular de Xarxa Viària, Vicent Tur, confía en que en marzo o abril se pueda acabar el proyecto de mejora de la carretera de Sant Joan a sa Cala de Sant Vicent. Ese tramo ya ha sido asfaltado, pero la colocación de la capa antideslizante deberá esperar a marzo o abril, cuando se reduzca considerablemente la humedad.

Mientras tanto y salvo imponderables, Tur espera que se inicie de una vez el asfaltado de la carretera de Santa Eulària, que va camino de convertirse en el Guadiana de las obras pitiusas por las ocasiones en que se ha iniciado parcialmente para luego aplazarse. Otra de las intervenciones interminables a la que los políticos ya no se atreven a poner un plazo es la de la ronda norte de Sant Antoni, que, según Vicent Tur, acumula ahora retrasos por los cables que la compañía Gesa aún no ha retirado.

Una de las obras estrella del año será la reposición asfáltica del primer cinturón de ronda de Eivissa, que se encuentra en un estado tan pésimo como el de las carreteras de Santa Eulària y de Sant Josep. El conseller de Xarxa Viària dice que ahora se está redactando el proyecto y que se adjudicará antes del verano.

Otra pequeña obra que Xarxa Viària espera iniciar este año es la rotonda de ses Païsses, en fase de redacción y cuyo proyecto ya ha sido mostrado a los representantes vecinales.