El derribo de la plaza de toros va a traer cola. El Ayuntamiento de Eivissa mantiene firme su idea de reconvertir el solar de 3.000 metros cuadrados en un parque público con espacios verdes. Para ello, aprobó ayer provisionalmente en pleno extraordinario, con el voto a favor del PP, una modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para que la calificación de la parcela pase de ser residencial a zona verde y espacio público.

Ahora, la Comisión Insular de Urbanismo (CIU) debe hacer la aprobación definitiva de este cambio de calificación para que se abra el expediente de expropiación, algo que no agrada a la oposición y mucho menos a la propiedad.

El PP votó a favor de la modificación del plan general para que la plaza de toros pueda convertirse en una zona verde, pero reclamó al Pacte que busque una fórmula para evitar la expropiación. «Nos consta que desde septiembre [fecha en la que se aprobó inicialmente el cambio del PGOU] no han hablado con la propiedad. Pedimos que en vez de expropiar lleguen a un acuerdo con los propietarios ya que si no el Ayuntamiento puede verse abocado a conflictos judiciales que no son buenos para la institución», dijo la portavoz del PP, Virtudes Marí.

El Consistorio ha rechazado las 15 alegaciones presentadas por la propiedad en contra de la modificación del PGOU. El edil de Urbanismo, Joan Boned, justificó que el Ayuntamiento ha intentado hablar con los propietarios, pero como no ha podido localizar a todos se ve obligado a expropiar: «Basta que uno no quiera vender para que todo se vaya a pique. Si expropiamos es porque así lo han propuesto los servicios técnicos. La plaza de toros es un problema y esa zona necesita un espacio público. Los que gobernamos estamos para tomar decisiones para el bien público, aunque éstas sean dolorosas».