Las obras de asfaltado de las calles de la ciudad de Eivissa comenzaron ayer por la vía que conduce al cementerio viejo, en el barrio de ses Figueretes. Agloisa cerró al mediodía el paso de los vehículos por esta calle, lo que provocó retenciones en la entrada y salida de ses Figueretes. El asfaltado de toda la zona se prolongará durante al menos 10 días. Después Agloisa continuará la primera fase de pavimentación de las calles de Eivissa, que tiene un coste de 1,1 millones de euros (casi 200 millones de pesetas), por el Ensanche, la calle Aragón, la calle Madrid y el Mercado Nuevo.

El proyecto contempla asfaltar el 80 por ciento de las calles de la ciudad en un plazo de dos meses, incluido el parking de Pere Francès, en ses Feixes. El contrato firmado con Agloisa fija un año de garantía, lo que obliga a la empresa a reparar todos los desperfectos que puedan producirse durante los doce meses siguientes a la ejecución de la obra. Las calles no recibirán una capa de asfalto sin más con el objetivo de quedar lisas, sino que, según el concejal de Obras, Antoni Roldán, se fresarán para quedar a la altura precisa de la acera.

Esta obra acumula un retraso de tres meses motivado por el recurso que presentó la empresa Naves y Conducciones (NYC) en contra de la adjudicación del proyecto a Agloisa. NYC alegó que no se había pedido la misma información a las dos empresas que optaban al concurso. El Ayuntamiento, por ello, se vio obligado a desistir de la propuesta inicial y reiniciar la licitación de las obras.